Reseña de "Vango", de Thimothée de Fombelle

"Hay puertas cerradas que ya ni vemos del miedo que nos da abrirlas. Hemos colocado muebles delante de ellas y hemos tapado las cerraduras con goma. Sólo los niños puede que se acerquen a mirar gateando esa rendija de luz roja que surge bajo la puerta, preguntando qué hay detrás. Pero Vango siempre había tenido miedo de aquel resplandor..."

El libro

Título en español: Vango. Entre el cielo y la tierra

Autor: Thimothée de Fombelle

Editorial: La liebre de marzo

Nº de páginas: 316

P.V.P: 20 € 

La historia

París, 1934. Delante de la catedral de Notre Dame de París, un joven está a punto de ser ordenado sacerdote. De repente, momentos antes de que tome sus sagrados votos, estalla el caos y se inicia una persecución en medio de la multitud. El joven Vango debe huir sin saber de qué le acusan. Huye de la policía y también de las misteriosas fuerzas que lo acosan sin darle tregua. Sin un momento de respiro, deberá indagar en su pasado para obtener respuestas. Su pasado oculta oscuros secretos y su infancia está llena de sombras. ¿Quién es Vango?

Pero el protagonista no lo tiene todo en contra. Aquí y allá podrá contar con algunos amigos que lo aprecian y estarán dispuestos a arriesgar su vida por él, como Mademoiselle, su amorosa niñera, el padre Zefiro, Eckener, el comandante del Graf Zeppelin, la escurridiza Gata y, cómo no, la cautivadora e intrépida Ethel, la chica de los ojos verdes.

Con su ayuda, Vango buscará su verdad y obtendrá algunas respuestas antes del final del libro, pero otras tendrán que esperar al segundo y último volumen de esta fascinante aventura. (Sinopsis oficial)

El autor

Nació en París en 1973 y pasó su infancia en el campo, con sus padres y todos sus hermanos. De esa época ha conservado siempre su amor por la naturaleza.

Fue profesor de letras en Francia y en Vietnam, pero enseguida se dedicó a la dramaturgia.

En 2006 aparece su primera novela para jóvenes, Tobie Lolness. Galardonada con numerosos premios prestigiosos (premio Saint-Exupéry, premio Tam-Tam, premio Sorcières…), tanto en Francia como en el extranjero, este relato ilustrado por François Place conoce un éxito internacional (es traducido a 29 lenguas). Después de un vibrante alegato a favor de la ecología, Celeste, mi planeta, escribe Vango, asombrosa novela de aventuras en dos volúmenes que seduce por igual a los lectores y a la crítica, y que ha recibido también varios premios (premio Ado-lisant, premio Les mordus du polar, premio Jeunesse…). Después, con Victoria rêve, rinde homenaje al poder de la imaginación.

Actualmente sigue escribiendo para el teatro. (Fuente: La liebre de marzo)

Valoración personal

Soy una lectora cómoda. Muy cómoda. No suelo alejarme mucho de mi zona de confort y rara vez escojo un libro de una temática tan diferente a lo que acostumbro leer, como es el caso de Vango. Vango es una historia original, entrañable, sorprendente y entretenida que, pese a ser muy diferente de mis lecturas habituales, me convenció. Cierto es que durante los primeros capítulos pensé que me iba a costar horrores leerlo. Sin embargo, tras acostumbrarme al peculiar estilo narrativo de de Fombelle y lograr ubicar a todos y cada uno de los personajes en la trama, Vango fue cobrando cada vez mayor dinamismo y fluidez hasta llegar a convertirse en mi primera gran sorpresa literaria del año 2016.

Vango es, ante todo, una novela juvenil de aventuras, un coqueto libro que la escritora Begoña Pérez Ruiz (por su mundo Azul la conoceréis) calificó acertadamente en su blog como "folletín francés". Personalmente, sostengo que Vango tiene un poquito de muchas cosas buenas: un poquito de Dumas, un poquito de Verne, un poquitín de cuento clásico, un poquito de los dibujos animados de antaño... Thimothée de Fombelle narra en esta novela la historia de Vango, un joven que, estando a punto de ordenarse sacerdote, es perseguido por la policía por una acusación de asesinato. A partir de ese momento, Vango recorrerá media Europa tratando de averiguar dos cosas: por qué lo persiguen y quién es él realmente. 

Además de contar con un protagonista de excepción, Vango presume de un grupo de secundarios de lujo, entre los que se incluyen la inolvidable Mademoiselle, mujer que crió a Vango, la insustituible Ethel o la enigmática Gata. También los antagonistas son dignos de mención y unos y otros destacan por su humanidad, su profusión de rasgos psicológicos y por una rara y agradable cercanía al lector.

Aunque la historia arranca en París a principios del siglo XX, Thimothée de Fombelle ambienta las peripecias de Vango en diversos lugares de Europa, como Escocia o las islas mediterráneas más recónditas. Además, la ambientación temporal de esta vistosa novela juvenil es fascinante en el sentido en que la vida de Vango y quienes lo rodean está fuertemente marcada por la influencia de algunas de las personalidades más relevantes del siglo XX, como Hitler o Stalin. 

Uno de los grandes aciertos de Vango es la pluma elegante y cuidada de Thimothée de Fombelle. De Fombelle tiene en cuenta en todo momento el público al que va dirigida su novela y se acerca a él por medio de un lenguaje sencillo, el uso de frases y párrafos brevísimos y un adictivo ritmo picado que contribuye a acrecentar el dinamismo de la novela. Si hay que ponerle un pero a este libro es quizás el abuso de saltos temporales (analepsis y prolepsis) que pueden confundir ligeramente al lector.

En resumen, Vango es una original novela de aventuras juvenil ambientada en la Europa de principios del siglo XX. Además de contar con una trama entretenida y repleta de acción, Vango presenta un exquisito tratamiento de personajes principales y secundarios y un estilo narrativo inigualable. Un libro para todos los públicos, escrito con cabeza y un innegable buen gusto. ¡No lo pierdas de vista!

Puntuación: 8/10

Con la colaboración de Begoña Pérez Ruiz